miércoles, 23 de julio de 2014

En busca de un hogar - Claudia Cardozo



¡Hola!

Una nueva opinión respecto al libro que he leído. Espero que la disfruten. 

En busca de un hogar — Claudia Cardozo

Londres, 1890
Juliet Braxton es una joven de origen estadounidense que vive en la Inglaterra de fines de la Era Victoriana junto a una abuela de férreo carácter, un tío amable, pero poco apegado, y un primo, por quien siente un profundo afecto fraternal. Su mayor ambición es regresar al que considera su hogar, en donde vivió una feliz infancia. Sin embargo, pese a contar con medios propios para hacer realidad sus sueños, no cuenta con la aprobación de su familia.
Robert, Conde Arlington, vive en la tranquilidad del campo con su madre, la condesa viuda, una mujer activa, generosa, y que muestra adoración por su hijo; lo único que Robert encuentra intolerable, es la constante intervención de su madre en su vida, intentando convencerlo de que se case lo antes posible a fin de que le dé nietos. A él esto no le hace ninguna gracia, y procura mantenerse alejado de cualquier tentación, pero un accidente pone en su camino a Juliet, que junto a su primo, le ayudan en un momento de necesidad.
Desde entonces, por un motivo u otro, sus caminos parecen cruzarse una y otra vez, y pese a que él hace todo lo posible por ignorar lo que esta joven le inspira, no puede evitar sentirse atraído y buscar su compañía. Ella, por su parte, temerosa de los sentimientos que Robert le inspira, y obsesionada con la vuelta al país que considera su hogar, procura mantenerse alejada... pero el destino les tiene deparadas muchas sorpresas.
Atracción, intrigas, ambición; pero, sobre todo el amor, son los pilares de esta novela.

Dando inicio, comienzo como suelo hacerlo, con la portada. Debo decir que es bonita, diferente a lo que se suele ver cuando se habla de novelas históricas. Un dibujo sencillo, pero que logra mostrar la esencia del libro.

Debo decir que esta es la primera historia que leo de esta autora y reconozco que me gustó mucho su estilo y su forma de narrar; es amena y, en mi opinión, no se me hizo para nada pesada siendo que tiene bastante texto por leer.

Nos encontramos con una joven que se encuentra de repente con la ausencia de sus padres y que debe abandonar, por orden de su abuela, el lugar que siente como su hogar en América. En una aristocracia donde la opinión de las mujeres, más si son menores de edad, no tienen cabida, Juliet no tiene ninguna opción a réplica y cumple estrictamente con lo que su abuela le impone.

La ciudad no le agrada, y no pierde la esperanza de algún día poder regresar al hogar que compartió con sus padres y donde tiene muy buenos y hermosos recuerdos.

Sin embargo, teme que pueda cumplirlos. Su abuela no desistirá en el empeño por presentarla en sociedad y encontrarle el mejor pretendiente que una joven de su clase pueda tener.

Por otro lado, conoceremos a un hombre aristócrata, sí, pero con grandes valores, que se empeña por mantener lo que le fue heredado y que intenta mantenerse al margen de las habladurías típicas respecto a solteros codiciados por madres casaderas como es su caso. Me gustó este personaje porque es sencillo, sabe lo que quiere y no duda cuando se trata de sus sentimientos, aunque le haya costado un poco reconocerlos. No es el clásico libertino ni el típico hombre que a rajatabla le huye al matrimonio o que termina rendido a los pies de una joven que logra enloquecerlo. Robert tiene un gran corazón, es noble y logrará romper con la tozudez de la joven Juliet, quien se empeñará en querer regresar a su hogar de niña a toda costa.

Es así que estos dos se encontrarán en varias ocasiones. Una amistad, aunque algo extraña, surgirá entre ambos, pero que pronto se convertirá en algo más, pese a que les cueste admitirlo, más por parte de ella que de él.

Destaco el personaje de Charles, el amigo de Robert, que, si bien es escasa su participación, me ha gustado mucho por su forma de ser tanto con Robert como con Juliet.

De Daniel, el primo de Juliet, solo diré que me pareció algo infantil con su actitud. De la abuela, Lady Ashcroft, una mujer clásica y aristócrata como muchas tantas de esa época.

La que me gustó fue la madre de Robert, Lady Arlington, una mujer sabia y con un gran corazón, que vive por su hijo y que lo comprende mejor que nadie.

Una historia que nos llevará a conocer el interior de cada uno. Descubriremos que el amor todo lo puede y que eso que llamamos hogar es aquel que nos da cobijo siempre, sin importar dónde este se encuentre.

Cariños,  

1 comentario:

  1. ¡Hola!

    Me he emocionado al leer tu reseña, es encantadora, muchas gracias. Como te he mencionado antes, me alegra que disfrutaras de la historia, he disfrutado leer tus opiniones acerca de los personajes y en particular de Charles, a quien le tengo mucho cariño.

    Gracias una vez más por leer la historia, y por hacer esta fantástica reseña.

    Mil besos.

    ResponderEliminar